Frigidez: Causas, efectos emocionales y formas para enfrentarla
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Frigidez. Esa palabra que asusta, que parece un monstruo escondido bajo la cama, no es otra cosa que la falta de deseo o goce sexual. Es cuando te sientes desconectada de tus ganas de hacer el amor y comienzas a buscar excusas que expliquen esa sensación.
El cansancio físico, el estrés, un tratamiento médico, los problemas personales, los cambios hormonales, la ansiedad… Cualquiera de estos factores pudiera ser atribuido a esa inapetencia sexual.
Lo importante que debes saber, es que la frigidez no es algo que pueda determinar tu vida, ni mucho menos tu autoestima. No te definas por un momento, sino por cómo decides enfrentarlo y superarlo.
Te invitamos entonces, a ¡explorar!
Causas de la frigidez: ¿De dónde viene este monstruo?
Puede que pienses que la frigidez es solo un signo de la edad, pero la verdad es que puede aparecer en cualquier momento. La menopausia es una de las grandes culpables, sin duda, pero no solo esta condición es influyente en la disminución de tu deseo sexual.
También están el estrés, las preocupaciones de todos los días, y claro, la falta de tiempo para una misma. ¿Cuántas veces has dejado de lado tu bienestar por atender a los demás?
Pero más allá de lo físico, la frigidez también tiene un impacto emocional. La falta de deseo puede hacerte sentir menos mujer, menos atractiva, y eso puede llevar a un círculo vicioso en el que cada vez te sientes peor contigo misma.
El efecto en la autoestima: Cuando el deseo se esfuma
Sentir que tu libido se ha tomado unas largas vacaciones afecta más de lo que piensas. La frigidez te hace cuestionar tu atractivo y hasta tu capacidad para disfrutar de la vida, pues esa desmotivación afecta tu cuerpo y hasta tus ganas.
Al sentirte mal en tus emociones, es más difícil reconectar con tu deseo sexual. Es un círculo vicioso, pero uno que por fortuna puedes romper.
Tratamiento no médico
Algunas recomendaciones efectivas que te pueden ayudar a superar esta crisis son:
Comunícate
Habla con sinceridad con tu pareja sobre tus gustos y preferencias. Ese proceso puede favorecer el ambiente y estimular tu apetito sexual.
Adopta hábitos de vida saludables
- Limita el consumo de alcohol, pues este puede mitigar tu respuesta sexual.
- Imponte una rutina de ejercicios que incrementen tu energía, levanten tu estado de ánimo y mejoren las emociones románticas.
- Procura reducir el estrés, para que puedas concentrarte y disfrutar de las experiencias sexuales.
Asesórate
La opinión de un terapeuta experto en sexualidad te ayudará a optimizar la respuesta sexual de tu cuerpo y mejorar la intimidad con tu pareja.
Usa un lubricante
Este puede ser útil mientras copulas, si sufres sequedad vaginal o dolor durante las relaciones sexuales.
La masturbación
La masturbación es una de las estrategias más poderosas para reconectar con tu cuerpo y despertar nuevamente ese apetito sexual que creías perdido. La autoexploración te permite conocer qué te gusta, qué te hace sentir bien y, sobre todo, te da la confianza de que aún puedes disfrutar de tu sexualidad.
Prueba con un dispositivo. La excitación puede intensificarse si estimulas el clítoris, y nuestra recomendación, como sexólogas, es el uso de Triorgasmic de Zenzsual.
Este dispositivo está diseñado para estimular el clítoris, la vagina y el ano, despertando esas fabulosas sensaciones que quizás creías olvidadas. Con su material suave tipo gel y libre de látex, es perfecto incluso para las mujeres con piel sensible.
Atrévete a probarlo, pues conocer tu cuerpo es el primer paso para superar la frigidez. No tengas miedo de explorar, de experimentar y de redescubrir lo que te hace vibrar.
Recupera tu apetito sexual, conócete, ámate y disfruta. La frigidez no es el fin del mundo y mucho menos el fin de tu vida sexual.
Con un poco de autoexploración podrás reencontrarte con esa mujer apasionada, y lista para disfrutar de su sexualidad y vivir en plenitud.
Archiva nuestros consejos en tu fichero íntimo y enciende la llama en tu cuerpo.
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